Starling Marte Tiene 35 años y viene del tipo de temporada que suscitan preocupaciones sobre la viabilidad de lo mucho que le queda. Si todo va bien, volverá a la parte alta de la alineación. Si todo va mal, su contrato se convierte en un albatros y no sólo para este año.
En 2023 el dominicano vio menguar sus números después de someterse una doble cirugía en la ingle, situación que repercutió también en el desempeño ofensivo de los Mets de Nueva York, elenco que ahora tendrá a Carlos Mendoza como mánager.
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Al guardabosques quisqueyano le restan 2 años en su contrato con 37 millones de dólares pendientes, por lo que relegarle a la banca no parece una opción rentable en las primera de cambio para el elenco de Queens.
Desde el momento de su contratación, el estratega venezolano no se comprometió sobre cómo ordenará la alineación de los metropolitanos, pero claramente el motor zumbó en 2022 cuando Marte estaba sano, bateando segundo detrás de Brandon Nimmo y delante de Francisco Lindor y Pete Alonso.
Marte dio, como mínimo, un paso simbólicamente positivo hacia ese destino el miércoles cuando jugó por primera vez esta primavera, liderando y jugando en el jardín derecho contra Cardenales de San Luis. Al primer lanzamiento que vio de Miles Mikolas, aunque falló, conectó sólido al jardín derecho, luego se ponchó con 3 lanzamientos del cerrador de Ryan Helsley.
El nativo de Santo Domingo Marte ha asistido a 2 Juegos de Estrellas, en su primer año con los Mets dejó 3.8 en war de Baseball Reference, pero el año pasado careció de la calidad eruptiva que distintiva en su carrera, arrastrándose a un war negativo de -0,8 y jugando solo 2 compromisos después del 16 de julio, sin embargo, en la Liga invernal de su país, en 11 juegos con Leones del Escogido mostró mejor salud ante espectadores que incluyeron a Mendoza y David Stearns, presidente de operaciones.
Aunque los Mets confían en sus jugadores de reserva, la presencia del dominicano cambia la dinámica de la alineación. Lindor cita que el juego evoluciona hacia un estilo más atlético que Marte siempre ha ofrecido, y «él todavía puede jugarlo, robar bases, defensa, anotar desde primera base, conducir la bola, ponerla en juego. Ese es su juego».
Las primeras señales son buenas. Pero ésta es la época del año para los primeros indicios positivos. El largo plazo se marchita, especialmente para un jugador de 35 años que regresa de una temporada baja y de una operación.
Marte, no obstante, dijo que espera ser él mismo. Y la diferencia de lo que significa si está bien o mal se exhibió en lo que los Mets tenían en 2022 y no tenían en 2023
«Definitivamente, nos perdimos lo que trae el año pasado», dijo Chávez. «Tuvimos una especie de goteo a través de la alineación. Pero cuando él está allí y es explosivo y está robando bases y causando estragos y llegando a la base frente a los grandes, definitivamente somos un mejor equipo.»
