Billy Monger quien está participando este año en la Formula 3 británica, donde dejo su sello con un podio en su debut, pero no esconde su sueño de alcanzar algún día la máxima competición a motor. Un reto difícil para cualquier piloto, pero mucho más para este joven que perdió las dos piernas en un terrible accidente en la F4 hace poco más de un año.

Monger no se conforma y en esta semana tuvo un nuevo premio, y es que se le concedió una sorpresa y fue la de realizar un test con un F1.

Billy se despertó como cualquier día normal pero lo que no se imaginaba es que ese día le tenía una bonita sorpresa, pues se le comunico que podía participar en un evento de F1 Heritage que le ofrecía la opción al piloto de pilotear un Sauber C30 con la especificación 2011 en el circuito de Rockingham, pista en la que ya había corrido en este mismo año.

Monger, no dudo de la oportunidad de subirse a un monoplaza que antes habían conducido Sergio Perez, Kamui Kobayashi y Pedro de la Rosa.

Por supuesto, el monoplaza contaba con un asiento adecuado a sus necesidades y todas las funciones adaptadas en el volante para que el británico pudiese dominar el monoplaza con sus manos. Su sueño de llegar a la F1 esta cada vez mas cerca.